Jorge no quería invitar a ningún amigo. Era muy malo y no le gustaba la amistad. Prefería dinero que jugar con sus amigos. No le importaba nada, todo el mundo le odiaba, pero faltaba poco para su cumple. Era el 24 de noviembre de 2008. Tenía 4 años y iba a cumplir 5 años. Cuando era su cumple no tenía que hacer invitaciones ni bocadillos.
Sería genial pero no molaba estar solo. Era un niño muy guapo, pero muy mal educado y tonto. Cuando iba al cole, en el recreo se quedaba en un banco aburrido pero un niño de 6 años se acercó y dijo: ¡Hola! ¿Como te llamas?
-Me llamo Jorge ¿por qué lo preguntas?
-Porque quiero ser tu amigo.
Y fueron amigos y él le explico todas las cosas pero nunca le hacía caso. Pensó celebrar una fiesta para que comprendiera la amistad pero Jorge vio a los niños cogiendo sus juguetes y se los quitó de la mano. Nunca comprendía la amistad porque no la intentaba.
Un día fue a recoger manzanas al bosque y no sabía que estaba su amigo y le explicó la naturaleza.
Y de repente todos los niños del mundo salieron y por fin lo comprendió:
El amor es mejor que el dinero.
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